• +591-3353357
  • contacto@fundep.org.bo
  • Santa Cruz, Bolivia
Academia por la libertad 2019
LA CORRUPCIÓN

LA CORRUPCIÓN

Miguel Saravia Calderón

 

“Un pueblo que elige corruptos, impostores, ladrones y traidores, no es víctima, es cómplice” George Orwell

La corrupción es un cáncer diagnosticado, en Bolivia la primera reacción ante este problema es poner entredicho la eficacia de los organismos de control y del sistema judicial, no hay la independencia para fiscalizar a los gobernantes, como por ejemplo, lo hay en los EE.UU, cada ciudadano tiene el desafío de cambiar la actitud moral y perversa que tiene los funcionarios y nuestras autoridades a la hora de administrar los recursos del país.

La corrupción frena el crecimiento económico, genera el uso ineficiente de los recursos, genera obrar mal diseñadas, no genera mejores condiciones de vida para todos, afecta el estado de derecho, agota la riqueza nacional, se invierte escasos recursos públicos en los sistemas educativos, de salud…etc,los sectores más vulnerables son los que sufren más ,estos sectores no cuentan con los fondos suficientes para acceder a servicios básicos, hay bastantes más factores que se pueden analizar y dar de ejemplo, tomemos en cuenta, la corrupción es un obstáculo en el desarrollo de nuestro país. En enero de este año salió un informe del índice de percepción de la corrupción a nivel mundial, en el cual Bolivia se ubica en el puesto 132 de 180 países analizados, en el año 2018 se ubicaba en el 112, a nivel internacional, Somalí y Siria, son considerados los países más corruptos a del mundo y Dinamarca y Nueva Zelanda los menos. El informe es realizado por la ONG transparencia internacional con ayuda de 12 organizaciones internacionales, realizando encuestas a expertos y empresarios sobre la corrupción en sus respectivos países.

Algunas responsabilidades por parte de cada ciudadano, un deber de todos: 1.-denunciar 2.-organizarse para resistir 3.-participar en la discusión 4.-exigir justicia. La corrupción se tiene que combatir con mano dura y cero tolerancia, de muy poco sirve meter “peces gordos” a la cárcel, si el sistema que les permitió crecer y nadar a sus anchas sigue intacto, la justicia, la libertad, el bienestar económico, no pueden ponerse como un privilegio exclusivo de un grupo minoritario, para combatir la corrupción se requiere sentar sólidas bases para recibir la educación y enseñanza en valores éticos en pro del bien común, es importante hacer conocer la información y dar conciencia para llevar a cabo con éxito esta misión que por ahora parece ciertamente una lucha muy dura.

 

*La opinión del autor es personal y no constituye una posición oficial de la Fundación Nueva Democracia.

 

Modificado por última vez en Domingo, 15 Diciembre 2019 02:05

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *